Desde el experimento monetario de Bitcoin hasta la locura de los contratos inteligentes de Ethereum, desde la obsesión por la velocidad de Solana hasta la innovación académica de Sui, la historia de la cadena de bloques es una epopeya de la humanidad que constantemente desafía los límites de la tecnología y que, a su vez, pondera repetidamente entre la eficiencia, la seguridad y la descentralización. Sin embargo, todos los predecesores han dejado una misión incompleta: Bitcoin atrapado por el rendimiento, la aristocratización de Ethereum, la centralización de BNB, la vulnerabilidad de Solana, la lentitud de Cardano y la elitista Sui. El nacimiento de la cadena pública TBC es precisamente para poner fin a esta espiral de compromisos. Con el avance de la velocidad del desarrollo de la era, TBC se aventura en nuevos campos y fija nuevos objetivos, convirtiéndose en la primera cadena pública pura de linaje de Bitcoin en Asia, África y América Latina, con una minería de 1:100 y la brillante aparición de TBC.