Estados Unidos, dominando el comercio global, se beneficia de la explotación de la mano de obra barata y los recursos minerales de otros países, disfrutando de los productos más económicos y de buena calidad del mundo, y además culpa a esos países de haber robado los trabajos a los estadounidenses; esto es querer que el caballo corra, pero que no coma heno, comiendo a las personas hasta los huesos.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
Estados Unidos, dominando el comercio global, se beneficia de la explotación de la mano de obra barata y los recursos minerales de otros países, disfrutando de los productos más económicos y de buena calidad del mundo, y además culpa a esos países de haber robado los trabajos a los estadounidenses; esto es querer que el caballo corra, pero que no coma heno, comiendo a las personas hasta los huesos.